La administración de lotería La Ranita, ubicada en la céntrica calle Quintana, numero cinco, de Salamanca, ha celebrado este jueves haber inscrito «con las dos últimas balas» el nombre de la capital del Tormes en los premios mayores de un Sorteo de Navidad, que en los once anteriores había pasado de largo. A las 12:45 horas cantó el ultimo de los quintos premios con el 87092 y, mientras lo estaba celebrando, un minuto más tarde, a las 12:46 horas, saltó también el último de los cuartos gracias al 25296.
Mismo doblete, por cierto, consiguió la administración 7 de Valladoliden la calle Lencería, con dos décimos del cuarto y uno más de ese quinto premio en esos dos minutos que han supuesto 40.000 euros por un lado y 6.000 por el otro para tres acertantes que se acercaron al contador de esta calle junto a la plazaバリソレタナ市長。
2018 年のレパルティエラ エル ゴルドで、ナヴィダード デスデ ケ イェレババ シン ダル ウン プレミオ デ ナヴィダード デスデ ケ イェレババ シン ダル ウン プレミオ デ ナビダッド エル ゴルド。 Según confirmó a Ical Javier Garrote, de La Ranita, fueron dos los décimos premiados que han vendido, uno de cada número, así que los ganadores se llevarán 20.000 y 6.000 ユーロ、それぞれ. Eso sí, no sabe «ni como, no cuándo, ni a quién» se los entregaron.
Si bien reconoció que desde el verano aproximadamente el 80 por ciento de las ventas se hacen a turistas en su administración, Garrote explicó que los décimos agraciados son ‘salpicados’, más propios del último tramo de campaña, y que pudieron venderse entre el mes de noviembre y el propio día de ayer. «Entonces, por ahí podemos albergar la esperanza de que ese dinero se haya quedado en Salamanca, pero es algo que ahora mismo no podemos saber», indicó, recoge Ical.
El lotero mostró su satisfacción por volver a aparecer en los premios mayores y, sobre todo, «por la forma en que se ha dado». «Estamos contentos también porque Salamanca, en los once premios mayores que habían salido, no había aparecido su nombre por ning sitio. A mi, que soy de Salamanca, me gusta que, al menos en dos premios, haya salido», comentó el charro.
En cualquier caso, una auténtica alegría para su administración de lotería. «Te tiras seis meses trabajando sin parar y, al final, es una recompensa. ¿ペケーニャ? Pues sí, pero menos da una piedra», finalizó.